Por vos que encontraste la manera de desordenarte en mis problemas, que habitás los mismos lugares, logrando desconcertarme cuando no lo hacés.
Por vos entiendo que hay una soledad auténtica y otra disfrazada de compañía. Y me lo hacés notar de manera constante.
Por vos que entendés mis locuras de vez en mes y me torturás con lamentos aún siendo tan inútiles. Creés para desconfiar, y desconfiás para, en algún momento, volver a creer.
Vos, que buscás una y mil maneras de encajar las palabras y los actos, en situaciones que no ocurrieron. Y que ansiás congelar el tiempo en momentos errados, y con personas equivocadas.
Y no te importa el que dirán, pero pedís aceptación en más de un lenguaje.
Y no te importa ser así, pero por dentro no hacés más que planear cambios radicales para tu vida.
Por vos, que sos yo, por mí que sos vos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario