19 mar 2008

filatelia


Como una estampilla que ni bien iniciada la filatelia ya no tiene valor, suelo sentirme así. No tengo ánimo para tolerar volver a ser cambiada, o aún menos, desechada. Ningún coleccionista logra hallar tan deprisa el verdadero valor de una estampilla, y mucho menos, hacerla única. Siempre una y cada una, pasan a ser una más en su colección, ese parece ser su destino. ¿Habrá estampillas con un destino incierto? ¿O quizás alguna que ignore el estándar? Un estándar mueve multitudes, sin embargo un cambio (principalmente tratándose de un progreso) es contranatural. ¿Los filatelistas serán el problema? Efectivamente; muchas preguntas y pocas respuestas.

4 comentarios:

Aíta dijo...

...más de lo mismo, y menos también...
Viste como es esto!, te planteas y te replanteas las cosas y llegás a la misma conclusión, "es todo una mierd*"

Saludos nena!!

Anónimo dijo...

todo depende... hay algunas estampillas que son pretendidas por todos los coleccionistas, pero muy pocos las consiguen...
beso

Tess dijo...

Siempre hay muchas preguntas y pocas respuestas.

Use la frase "¿Cuántas veces te sumaste al montón por miedo a ese montón?" que saque de la entrada anterior para el titulo de mi blog.
Espero que no te moleste, cualquier cosa decime y lo saco.
besooo

Tess dijo...

Cambie mi direccion, ahora es http://punchline-before-joke.blogspot.com/
Si queres cambiala en tus nicks ;)
un besittooo